El sábado con la meteo un poco incierta nos vamos al Valle de Hecho. Dentro de poco va a empezar la temporada de esquí y tenemos que poner las patas a punto.
Azucena nos recomienda el Castillo de Acher y junto con ella, Javi, Edu, Pinós (y su perra Neus), Jorge y yo, no vamos para allá.
El valle en estos momentos está precioso; el otoño nos sorprende una vez más con miles de colores y cada uno con su cámara se esfuerza por retratar lo que sus ojos ven…
La cima impresionante. Desde abajo no te puedes hacer una idea de cómo realmente se ha ido formando esa «fortaleza amurallada». Lástima que el día no estuviera despejado del todo
Esta excursión sirvió como entrenamiento, ya que Neus (la perra de Pinos) estaba en celo e iba loquica con todos los animales que se iba encontrando por el camino. (pasó de ser perra a golfa..)