Este fin de semana decidimos retomar nuestra aventuras con la escalada de autoprotección a lo grande. Nos pusimos de acuerdo con Abel para subir a escalar en el Midi e intentar una vía el sábado y otra el domingo, al final el tiempo solo nos dejo hacerlo el sábado, pero el regusto que nos dejo la vía hizo que bajaramos para Zaragoza mas que satisfechos.
Quedamos a las 8 en la Maz, y entre el viaje, la aproximación a Pombie con los mochilones, el hacer material y aproximar hasta la pared empezamos a escalar a las 12:30. Hora nada aconsejable si el objetivo hubiera sido una vía larga, aun recuerdo nuestras penurías del año pasado en la Fouquier.
Pero esta vez venimos fuertes, motivados y con mas experiencia, sobre todo la de Abel que ya está mas bregado en estos temas. Nos ponemos de acuerdo para escalar la Jolly, y nos repartimos los largos de la siguiente manera: yo tiraré los 4 primeros y Abel los tres últimos (Vane se dedicará a la escalada de placer) siguiendo la reseña de Luichy. Cuando llegamos abajo nos dimos cuenta que lo habíamos hecho como marca la reseña de Korkueika (un largo menos) y en algunos tramos nos parecio mas acertada.
Los dos primeros largos son comunes a la sudeste clásica y tienen tendencia a la derecha con varios sube y baja hasta llegar a una cómoda repisa. En el tercer largo me debí salir del trazado original y me toco navegar y apretar de lo lindo por una zona de dificil protección, asi que llege tocado despues de 65 m. un poco tensos. (No desviarse hacia la derecha…). Al salir de la reunión de alliens que había montado retome una canal con bastantes clavos y una escalada generosa en agarres que te deposita en la incomoda R5. Para mi el mejor largo de la vía.
A partir de aquí Abel se curro los dos largos que faltaban. Sobre todo el infumable último largo al que no le vi ninguna posibilidad en la primera panza, despues se dejaba hacer, pero llevando la cuerda por arriba!!! De primero hubiera sido otro cantar. Me encanto un offwidth de la parte final, nunca habia escalado asi y sufrí un montón para desencajarme cada vez que hacía fuerza con las piernas, pero no me resulto complicado progresar.
Para bajar conocimos los famosos rápeles del midi. Que ricos los clavos!! En este caso bajamos por los de la surplombs, que son bastante evidentes y siguiendo la vertical, pero estar atentos en el primero de ellos a coger la canal de la izquierda según bajas, si no pueden complicarse. En total nos costo 5:30 subir y 1:30 bajar, y llegamos tranquilamente a las tiendas con tiempo de cenar y disfrutar de la botella de vino que habíamos subido para celebrar nuestro éxito.
Al día siguiente amanecio lloviendo, así que para abajo. No nos importo demasiado, sabemos que vamos a volver pronto por estas montañas. Vemos objetivos alcanzables en las vías que surcan sus paredes. Sufriremos de nuevo con los retos que nos propongan.