El finde, por culpa de la meteo, está un poco indeciso. No sabemos si ir a San Fausto con Javi y Azu, a Morata o a Riglos.
El sábado finalmente nos juntamos con Javí y Azu en Morata, donde nos vamos más que contentos con unos cuantos proyectos a la buchaca (el entrenamiento de todo el año parece que funciona!)
Con ganas de hacer tapia, después de la experiencia del Midí decidimos irnos a hacer algo equipado. Estabamos dudando entre la Galletas (Riglos) y el espolón del Gállego (en peña Rueba). Al final se apuntan Beto, David y el Agüelo y nos vamos al Espolón del Gállego, vía abierta por Julio Benede y Luis Royo, aparentemente sin sorpresas.
Vía de grado disfrutón, aunque se «acere» algún paso, (aunque como diría Beto es chapaje de seguridad, jejeje), vistas impresionantes, aproximación cómoda. No es de extrañar que se esté poniendo tan de moda, pues el domingo estabamos 4 cordadas…
Nos quedó la espinita de no llegar a cima, pero no queríamos que las sensaciones que habíamos tenido a lo largo de toda la escalada, pudieran cambiar; vamos que no vimos el espolon fuertes de la misma calidad…
Eso si, mi cabeza tiene el pensamiento en la Galletas, nuevo mallo y una botella de vino (Firé, bodegas Pegalaz por descorchar)
