El domingo nos fuimos en busca del sol con los amigos.
Edu tenía ganas de aprender y Lupo de recordar; así que convencieron a las muchachas y se vinieron con nosotros a Morata.
Primero estuvimos en el Almendro, IV y V. Jorge se animó con la vía»capazo loco» que es un 6a potente.
Contentos nos fuimos al Mazizo de Alí, alli les abrimos dos vias a Edu y Lupo para que practicaran y Jorge y yo nos fuimos a hacer una de varios largos, «clasicos de ayer y hoy». El primer largo facilito, muy cómodo, con buenos agarres y buena reunión. Mi cara lo decía todo, que bueno cuando calienta el sol.
El segundo largo lo hace Jorge, cuando le quedan tres metros para llegar a la reunión, sale un «peazo» de su nidito, vaya susto! Pero la sorpresa se la encuentra Jorge en la reunión, que esta con huevo incluido.
Subo ya cagadita de miedo, pensando en que va a venir mamá buitre toda ofendida y nos va a atacar a picotazos. La subida es rápida y solo pienso en bajar a sitio seguro; así que me ofrezco en ser la primera en rapelar…
Cuando llegamos a tierra firme, reponemos fuerzas y acompañamos a los amigos al coche que ya se van. No queremos marcharnos todavía, así que sacamos el libro y miramos qué podemos hacer. Nos decidimos por «el creador de sueños», aun no ha empezado la nidificación y podemos hacerla. Dejamos la cuerda siemple, cogemos las dobles y nos disponemos a ir allí. Oh, mierda ! esta acupada y justo cuando llegamos están empezando.
Cambio de planes; dejamos las dobles, pillamos la simple y nos vamos a la vía de laso y fisura castané. Le cedo a Jorge los honores; me aprietan los gatos nuevos una pasada y empiezo a estar cansada después de dos días.
Son las cinco y media de la tarde, llevamos desde la nueve de la mañana. Decidimos irnos, no sin antes hacer parada en casa de unos amigos a echar una cerveza 😉