Directa Osborne, algo mas que una vía

Esta semana pude disfrutar de mi primera escalada en Cienfuens, un pared solitaria y apartada de la que había leido alguna piada, pero sin duda una pared que hace honor a su aura de majestuosidad. Aderezado con las restricciones  estacionales por nidificación, la larga aproximación por pista y el escaso equipamiento presente, hacen que venir a escalar a este sitio sea una actividad comprometida y excepcional.

La vía elegida en esta ocasión es la «La Directa Osborne» (reseña). Sin duda una vía peculiar dentro del abanico de posibilidades que se nos ofrecen, porque presenta dos estilos completamente diferenciados. El caso es que la cordada que la equipo está compuesta por Armand Ballard, severo donde los halla, que equipo los tres primeros largos. Dos de ellos de 6a+ y otro de V, en los que en cuarenta metros de largo mete un clavo o dos paraboles, a elegir. La otra parte esta equipada por otro fiera, Luichy, persona prolífica y mucho mas humana, que amablemente nos deja paraboles en las zonas que superan el V+, pero tampoco en exceso. Por debajo de eso, autoprotección. Las reuniones equipadas.

En fin, por la red he leido que la vía era «sencilla y divertida». Divertida a rabiar, sencilla es una manera de definirla. Yo que me muevo por el 6b con ganas y confianza de estar haciendo 6c en poquito tiempo, me vi «preto» de narices en los largos desequipados, y es que ir recogiendo material e intentando encadenar sobre fisura se convierte en un ejercicio mucho mas duro y comprometido que los «pegues» de la liviana deportiva. Unas foticos para probar mis palabras!! Y con retoque!!

Pero sin duda una cosa marco esta escalada para mi. Por fin podía escalar una vía con un gran escalador, sin duda alguna la persona que ha hecho que yo pueda escalar esta vía. Por su aliento, su motivación, su ayuda y su amistad. Y le agradezco por todo ello.

No podía pasar por alto la prueba del delito. Sí, sufrí. Sufrí como una perra y tengo pruebas. Y sepan que lo que he hecho conmigo lo puedo hacer con ustedes. Así que no olviden traer consigo su mejor «sonrisa profiden»  en sus escaladas a partir de hoy!

 

Iniciación en la autoprotección

El domingo el día amanece despejado y nos vamos a desayunar tranquilamente al pie de la torre de marfil. Un sector llamativo del valle del ampriu visible desde la carretera que discurre por allí, en total unos 100m de vertical con una adherencia excelente.

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Nos subimos con todos los trastos a intentar “No te tires que hay cristales”, una via de tres largos (V) sobre un diedro muy interesante y técnico. Juan nos había dejado un juego de friends para practicar la autoprotección y la vía se hizo mas dura de lo normal al ser la primera vez que utilizabamos este tipo de aparatitos. Es cierto que los seguros alejan, pero si vas bien de coco la vía se puede hacer perfectamente sin llevar nada.

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En nuestro primer contacto con la escalada de autoprotección sacamos algunas conclusiones: debimos poner bien los friends ya que ninguno se salió ni se quedo dentro, escalar unicamente con tus seguros tiene que hacerse muy duro ya que no dejamos de chapar ningún parabolt, es mas fácil ver los anclajes para friends que para fisureros, cuesta mucho liberar la mente para empezar a confiar en los nuevos materiales…

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La bajada la hicimos por detrás en un corto rapel de 10m desde el pino de la última reunión y después en comodo descenso por un caminito que desciende hasta la pista. Nos indico el guarda del albergue del Run, majísimo, seguro que paramos a tomar una cerveza la próxima vez que estemos por aquí.
En definitiva, una excelente actividad de iniciación a la escalada de largos, escalada de autoprotección y escalada técnica en diedro. Solo un consejo: ¡Ir en verano a esta vía! no le da el sol en ningún momento y nosotros pasamos bastante frío.

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Por cierto, mirad como amanecio el Perdiguero!! Todo llenico de nieve.