Después de un día de descanso para que nuestros pies y manos se recuperasen de las placas del día anterior, ponemos rumbo al refugio de Larribet a las faldas del Pico Artouste, donde se encuentra nuestro próximo objetivo: la excelsa
En poco menos de 2 horas estamos en el refugio, buscamos un vivac donde poder dormir pues nos negamos a pagar la desorbitada cifra que nos piden por pernoctar en el refugio. Que estamos en crisis!
Encontramos un súper hotel-vivac para 4 personas donde nos metemos los 5 algo justitos. Pero no pasa nada, lo importante es evitar en la medida de lo posible que la densa niebla nos moje; objetivo conseguido.
Al día siguiente, sin madrugar mucho, ponemos rumbo a la excelsa. En 45 minutos estamos en el pie de vía. Empieza la cordada Aguelo-Rasmias, seguida de los torpedos Abel y Ana.
El primer largo es una placa perfectamente equipada con un montón de piececitos por todos los lados. Un segundo largo de transición en travesía. Un tercer largo que nos pareció a todos impresionante, super adherente, con regletas al principio y cazos después; un lujazo de largo. Y hasta aquí puedo leer: porque en la tercera reunión, comentando lo estupendo que nos ha parecido el largo anterior, de repente empiezo a oír “socorro”. Una cordada tres largos por encima nuestro han tenido un accidente y necesitan médico y helicóptero. Esperamos a que suban Abel y Ana y nos organizamos: Abel el mas experimentado en montaña bajara con Jorge el que mas corre, así la bajada y llegada al refugio es mas rápida. Iñaki-agüelo, el más fuerte, se quedará con las chicas por si la cordada necesita ayuda.
En hora y media aproximada llega el helicóptero y se llevan a los dos de la cordada. Miramos relojes y se nos ha hecho muy tarde. Decidimos bajarnos y dejar para otra ocasión la excelsa, que seguro volvemos, pero no se sabe cuando
Vuelta a Zaragoza, que empieza el segundo periplo de vacaciones y tenemos una ganas tremendas de ver a Aster
Vaya nochecita la del vivac y vosotros sin quejaros ni una sola vez, fuerte RASMIAS!!!!